En su casa de veraneo la familia Tyrone está reunida en una cena familiar, la pareja charla amablemente en el living, mientras se escuchan de fondo las risas de sus dos hijos varones.
Hasta aquí parece ser un entorno afable y amoroso, pero no va a pasar demasiado tiempo para que la realidad los encuentre y toda esa amabilidad se derrumbe.
El padre de familia, James, es un actor retirado, derrumbado por el consumo de whisky en exceso y su avaricia. Casado con Mary, una mujer de apariencia sumisa, devota de su familia y que esconde tras su falsa debilidad un gran drama, que todos pugnan por esconder, para poder soportar el dolor de un suceso del pasado que los atormenta.
Sus hijos son Edmund y Jamie. Edmund muestra talento para la poesía pero está gravemente enfermo, mientras que Jamie, obligado por su padre a dedicarse al teatro, no logra encaminarse y gasta todo el dinero que cae en sus manos en bebida.
En este marco de tanta angustia todos a cargan con dolores físicos y ancestrales. Se debaten entre quererse y sentir el odio más profundo.
El ambiente es lúgubre, como lo son ellos; las luces no se encienden. Por momentos todo parece a punto de explotar; y en ese terreno tan sombrío, aparecen también restos de ternura; se acarician y vuelven a rechazarse, y el vínculo se va descomponiendo.
Y entre los cuatro subyace alguien más, que no se ve, pero que vive latente, al que adoran, pero que a su vez, no los deja vivir en paz.
Largo viaje de un día hacia la noche de Eugene O’Neill, con dirección de Luciano Suardi
El elenco está integrado por Arturo Puig, Selva Alemán, Lautaro Delgado Tymruk, Diego Gentile y Julia Gárriz. La asistencia artística es de Julieta Abriola, el desarrollo creativo de Selva Alemán, Arturo Puig y Luciano Suardi, la música original y el diseño sonoro son de Carmen Baliero, el diseño de iluminación es de Jorge Pastorino y el diseño de escenografía y vestuario de Graciela Galán.
Las funciones se ofrecerán de miércoles a domingos a las 20.30 horas.
